A MI MADRE ABUELA
OH MUJER
De fuerte caracter tú eres
sabes reír y llorar, en el
duro caminar que te dejó
el tiempo al pasar.
Luchaste por subir la cima
de esa montaña tan inclinada
que te tocó vivir en esos momentos,
cuando la comida y el dinero son fundamentales.
Tus ojos de aceituna
muchas veces mojados estaban:
tus hijos crecían, como un roble te mantuviste
y cómo, no se, pero levantarte supieste.
Hoy la vida te recompensa.....
Tu pelo de canas se cubrió
tu rostro de arrugas se llenó
y tal vez tranquilidad no conociste
pero paciencia siempre tuviste.
Nos has enseñado infinitas cosas,
una de ellas es mirar al frente,
no detenernos y continuar por
mas que las caidas nos
interrumpan tu pasar.
Oh mujer, cuan bella eres
Oh mujer, de gran andar
Oh mujer no te detengas
pues a donde vayas nos
hemos de encontar.
OH MUJER
De fuerte caracter tú eres
sabes reír y llorar, en el
duro caminar que te dejó
el tiempo al pasar.
Luchaste por subir la cima
de esa montaña tan inclinada
que te tocó vivir en esos momentos,
cuando la comida y el dinero son fundamentales.
Tus ojos de aceituna
muchas veces mojados estaban:
tus hijos crecían, como un roble te mantuviste
y cómo, no se, pero levantarte supieste.
Hoy la vida te recompensa.....
Tu pelo de canas se cubrió
tu rostro de arrugas se llenó
y tal vez tranquilidad no conociste
pero paciencia siempre tuviste.
Nos has enseñado infinitas cosas,
una de ellas es mirar al frente,
no detenernos y continuar por
mas que las caidas nos
interrumpan tu pasar.
Oh mujer, cuan bella eres
Oh mujer, de gran andar
Oh mujer no te detengas
pues a donde vayas nos
hemos de encontar.
Puño y letra de:
Silvia Hernández
Silvia Hernández
